“Nuestra ciudad, nuestro dinero”. Con este lema la Bristol Pound o libra de Bristol lleva circulando desde 2012 por las calles de esta gran ciudad inglesa. Se trata de una moneda local de curso no legal que se puede emplear alternativa y paralelamente a la libra esterlina en los comercios, tiendas y restaurantes de Bristol y alrededores, y cuyo valor es exactamente el mismo a la libra esterlina de curso legal.
La iniciativa nació de un nutrido grupo de comerciantes de la ciudad que imprimieron sus propios billetes con el objetivo de que el dinero gastado en la ciudad se quedase dentro de la misma ciudad. El dinero que invertimos en las tiendas y restaurantes locales sigue circulando dentro de la propia comunidad, a diferencia del que gastamos en grandes superficies y comercio online, que tiene un impacto mucho menor o nulo dentro de la comunidad. El dinero invertido localmente se reparte entre las personas cercanas, pequeños negocios y familias de Bristol, contribuyendo a la prosperidad económica de la ciudad.
Gracias al Bristol Credit Union, la Bristol Pound Community Interest Company y el gran apoyo al proyecto por parte del Ayuntamiento de Bristol, la moneda alternativa puede utilizarse hoy en más de 800 comercios de la ciudad. El ayuntamiento, además de aceptar pagos en libras de Bristol, da a sus 17.000 empleados la opción de cobrar una parte de su nómina en esta moneda y permite a los comerciantes asociados al proyecto pagar sus impuestos municipales con ella. El propio ayuntamiento facilita la implantación de la divisa y evita una de las mayores preocupaciones de los pequeños negocios: acumular esta moneda y no poder gastarla. Paralelamente puede cambiarse en los bancos locales por libras esterlinas sin coste adicional.
Con el objetivo de proteger al pequeño comercio frente a corporaciones extranjeras y comercio online, una de las condiciones para adherirse al proyecto es que sus dueños vivan en la ciudad o sus alrededores. La Libra de Bristol ha traspasado sus límites administrativos y ya es admitida en varios comercios de municipios a las afueras como Wells, Clipping Sodburry, Bath o Glastonbury. Para los comercios locales, esta moneda ofrece la oportunidad de atraer clientes conscientes del desarrollo local, anclando dinero a la comunidad.
Los Bristol Pounds están diseñados por los propios ciudadanos y los billetes son de lo más cool: con David Bowie en vez de la reina de Inglaterra, zorros y tigres pintados con spray o balones aerostáticos sobrevolando la ciudad. También dispone de una App para pagar a través del móvil y la posibilidad de pagar con SMS (txt2pay).
Según David Boyle, experto en economía de New Economics Foundation, “el modelo de la nueva moneda es sostenible y podríamos estar presenciando la reinvención de la forma en la que trabaja el dinero”. Esta moneda alternativa está vinculada con otros nuevos proyectos locales, tales como la producción de alimentos y de energías renovables, el transporte público (los autobuses locales también aceptan esta moneda) y el pago de impuestos municipales, por lo tanto, los consumidores pueden gastar esta moneda alternativa sin ninguna dificultad.
El éxito de la libra de Bristol radica en combinar esta moneda con otras iniciativas para promover una economía de forma paralela, sin imposiciones y sobretodo en incluir a las instituciones y el ayuntamiento potenciando el desarrollo local, una economía resilitente y aumentando la autosuficiencia comercial con identidad propia.