Por Alberto Goytre

El mundo del comercio está cambiando. El abanico de nuevas soluciones tecnológicas para mejorar la venta en tienda es impresionante: RFID, o internet de las cosas; reconocimiento y análisis de voz capaz de detectar matices emocionales; inteligencia artificial para personalizar al máximo la interacción, ya sea desde un dispositivo de digital signage o bien enviando información a los vendedores sobre los intereses de los clientes; sistemas de tinta electrónica para personalizar precios… son sólo algunas de las nuevas tecnologías que pueden mejorar los resultados de todo tipo de establecimientos comerciales.

Pero ojo, sin perder de vista el que es el máximo aspecto diferencial de la tienda física: un contacto físico y humano con el cliente; atender a cada uno de manera personalizada, proporcionarles una experiencia única; esto es esencial. Y lo es también que todos los trabajadores estén alineados en esta dirección. La reciente presentación de Iván Rodríguez, Business Developer Manager para Digital Signage de Maverick Techdata, evidenció que la irrupción competitiva del comercio online y la inmediatez de las compras por móvil son nuevas reglas de juego, responsables, entre otras, de un dato importante: el 52% de las empresas no existirán en su forma actual en 2021. O bien habrán cambiado, o habrán desaparecido.

Tecnología punta, pero también máxima atención al trato personal y directo: una combinación ganadora para el comercio de proximidad en el siglo XXI.